RIEGO
Riego por inversión, cuando la bola esté totalmente seca, sumérgela en un recipiente con agua y espera unos minutos, cuando dejen de salir burbujas puedes sacarla. Deja escurrir toda el agua, antes de volver a situarla en su lugar, así evitarás derrames o que quede demasiado encharcada.
Para compensar la sequedad del ambiente y conservar mejor el verde del musgo, puedes aportarle a tu kokedama un extra de humedad, mediante pulverizaciones cada dos o tres días.
Riégala una o dos veces a la semana en Primavera-Verano y una vez cada 10-15 días en Otoño-Invierno.
ABONO
Apórtales, un fertilizante para plantas verdes, disuelto en el agua cuando las riegues (disminuye la frecuencia en invierno).